El tifón número 7 de este año, llamado “Amby”, ha golpeado la región de Kanto en Japón. Recientemente, un usuario de Internet aprovechó el día de tifón para ir al supermercado a comprar provisiones y descubrió que todas las galletas de cola habían sido agotadas. No pudo contenerse y publicó un post preguntando al respecto, para sorpresa suya, descubrió que un comentario dejado hace 23 años fue el que llevó a los japoneses a comprar estas galletas cada vez que hay un tifón.
La historia comienza en 1996, cuando un tifón azotó Japón y un usuario de Internet dejó un comentario en un foro en línea diciendo que había comprado galletas de cola para pasar el tiempo durante el tifón. Desde entonces, cada vez que un tifón se acerca a Japón, la gente se apresura a comprar estas galletas. Incluso hay un término para ello, “comprar galletas de cola antes de un tifón”.
La publicación del usuario en el foro se volvió viral y se convirtió en una tradición para los japoneses comprar estas galletas antes de un tifón. Incluso después de 23 años, la tradición sigue vigente y sigue sorprendiendo a los extranjeros que visitan Japón durante un tifón.
Este fenómeno ha sido objeto de debate en línea, con algunos cuestionando si realmente es necesario comprar estas galletas antes de un tifón. Sin embargo, otros argumentan que es solo una tradición divertida y que no hay daño en seguir haciéndolo.
Lo que es seguro es que esta historia demuestra la influencia de las redes sociales en la sociedad moderna. Una simple publicación en un foro en línea hace 23 años ha llevado a una tradición que sigue vigente hoy en día. Además, también es un recordatorio de cómo los japoneses se preparan para los desastres naturales y cómo encuentran formas de mantenerse entretenidos durante los momentos difíciles.
Es inspirador ver cómo una simple acción puede tener un impacto duradero en la sociedad. Y también es un recordatorio de que incluso en medio de la adversidad, siempre hay espacio para la creatividad y la diversión. Así que la próxima vez que un tifón se acerque a Japón, no olvides comprar unas galletas de cola y unirte a esta divertida tradición.