El Instituto de Política Internacional Lowy de Australia (Lowy Institute) publicó el lunes (16 de julio) su informe anual de encuestas, que muestra que más de la mitad (56%) de los australianos encuestados creen que China se convertirá en la nación más poderosa del mundo en 10 años, en comparación con solo el 27% que cree que Estados Unidos seguirá siendo la “única superpotencia”. Además, solo el 36% de las personas creen que Estados Unidos actuará de manera responsable en el escenario internacional, una caída del 20% con respecto al año anterior y el nivel más bajo desde que el instituto comenzó a realizar encuestas en 2005.
Estos resultados son un reflejo del cambio en la percepción de los australianos sobre la posición de Estados Unidos en el mundo. Durante mucho tiempo, Estados Unidos ha sido visto como el líder indiscutible en el escenario internacional, pero la creciente influencia de China ha hecho que muchos se pregunten si esto seguirá siendo así en el futuro.
La encuesta también reveló que solo el 12% de los australianos tiene una opinión favorable de China, mientras que el 81% tiene una opinión favorable de Estados Unidos. Sin embargo, esta cifra ha disminuido en los últimos años, lo que sugiere que los australianos están cada vez más preocupados por la situación actual de Estados Unidos y su papel en el mundo.
Es importante destacar que estas percepciones no son solo el resultado de la política exterior de Estados Unidos, sino también de su política interna. La encuesta mostró que solo el 14% de los australianos tiene una opinión favorable del presidente estadounidense, Donald Trump, y el 60% tiene una opinión desfavorable. Esto sugiere que la retórica y las acciones del presidente están teniendo un impacto negativo en la imagen de Estados Unidos en el extranjero.
Por otro lado, China ha estado expandiendo su influencia en la región del Pacífico y en todo el mundo. Su iniciativa de la “Nueva Ruta de la Seda” y su creciente presencia económica y diplomática han sido bien recibidas por muchos países, incluida Australia. Además, el liderazgo estable y la estrategia a largo plazo de China han sido bien vistos por la comunidad internacional.
Sin embargo, es importante señalar que la mayoría de los australianos también tienen preocupaciones sobre el aumento de la influencia de China. La encuesta mostró que el 70% de los australianos están preocupados por la posibilidad de que China se involucre en conflictos militares en el futuro y el 65% están preocupados por la interferencia de China en los asuntos internos de Australia.
En general, la encuesta del Instituto Lowy refleja una creciente incertidumbre sobre el futuro del liderazgo mundial y la posición de Estados Unidos en él. Aunque China se está convirtiendo en una potencia mundial cada vez más poderosa, sigue habiendo preocupaciones sobre su comportamiento en el escenario internacional. Es importante que los líderes de ambos países trabajen juntos para abordar estas preocupaciones y promover una relación constructiva y mutuamente beneficiosa.
En conclusión, aunque los australianos ven a China como una potencia en ascenso, todavía tienen una opinión favorable de Estados Unidos y esperan que actúe de manera responsable en el escenario internacional. Con una cooperación y un diálogo adecuados, ambas naciones pueden trabajar juntas para enfrentar los desafíos globales y construir un futuro más estable y próspero para todos.