Desde un adolescente perdido hasta un mentor de vida, el impulsor de energía positiva, Zhang Dengkai, continúa compartiendo su experiencia personal en prisión, instituciones de bienestar social y escuelas. El 19 de mayo, junto con el vicepresidente de la empresa de recursos humanos Fujiang, Jiang Yuanfu, fueron a dos fábricas bajo la jurisdicción de la prisión de Hsinchu para compartir su historia de renacimiento con los internos y aprender de Jiang cómo ayudar a los ex presidiarios a encontrar trabajo y una vida estable. Zhang expresó su gratitud a Dios y al presidente de TTV, Wang Linglin, por su apoyo que le ha permitido devolver a la sociedad y ayudar a más personas a transformar sus vidas.
Zhang Dengkai, también conocido como “A Kai”, es un ejemplo vivo de cómo la determinación y la fe pueden superar los obstáculos y llevar a un renacimiento. Desde su adolescencia, pasó por momentos difíciles y se involucró en actividades delictivas, lo que finalmente lo llevó a la cárcel. Sin embargo, en lugar de dejarse abatir por su situación, A Kai decidió tomar el control de su vida y trabajar duro para cambiar su destino.
Durante su tiempo en prisión, A Kai se dio cuenta de que su verdadera pasión era ayudar a los demás a encontrar el camino hacia la redención y la transformación. Comenzó a participar en programas de rehabilitación y a compartir su historia con otros internos, convirtiéndose en una fuente de inspiración para muchos. Después de su liberación, continuó su trabajo en la comunidad, visitando instituciones de bienestar social y escuelas para compartir su historia y motivar a otros jóvenes a tomar decisiones positivas en sus vidas.
Con el apoyo de Dios y el presidente Wang, A Kai también se involucró en proyectos para ayudar a los ex presidiarios a reintegrarse a la sociedad. Este año, junto con el vicepresidente Jiang, visitó dos fábricas en la prisión de Hsinchu para compartir su historia y aprender cómo ayudar a los ex presidiarios a encontrar trabajo y una vida estable. Jiang Yuanfu, quien ha estado trabajando con ex presidiarios durante muchos años, compartió su experiencia y conocimientos con A Kai, y juntos discutieron formas de ayudar a más personas a tener una segunda oportunidad en la vida.
A Kai también expresó su gratitud a Dios y al presidente Wang por su apoyo y creencia en él. Con su ayuda, ha podido devolver a la sociedad y ayudar a otros a transformar sus vidas. A través de su trabajo, A Kai ha demostrado que no importa de dónde vengamos o cuáles sean nuestras circunstancias, siempre hay una oportunidad para un renacimiento y un futuro mejor.
En conclusión, A Kai es un verdadero ejemplo de cómo la determinación, la fe y el apoyo pueden ayudarnos a superar cualquier obstáculo en la vida. Su trabajo como mentor de vida y su compromiso de ayudar a los demás a transformar sus vidas es verdaderamente inspirador. Esperamos que su historia continúe motivando a más personas a tomar decisiones positivas y a encontrar su propio renacimiento.